La frase del título se atribuye por lo general al Reichsmarschall Hermann Goering (o Göring, según las grafías) y, reconozco que, al igual que le pasa a Mariano Rajoy, he acabado por entender a qué se refería.
La amiga Marisheli, nos ha enviado un tesoro, pero como es tímida y no lo publica ella, pues lo cojo y lo hago yo como vicario in partibus.
Tengo mi anécdota personal con el autor, que todos los clientes se conocen: estaba yo hace cosa de 12 años en mi caseta de la feria del libro antiguo en Recoletos. Era la hora de los profesionales, es decir: un día entre semana a la hora de comer, cuando uno puede huronear apacible y distendidamente , libro por libro sin que nadie te de el coñazo, y ahí estaba José Luis Sampedro en la caseta, mira que te mira.
Al otro lado del mostrador ("tablero" en la jerga del oficio), había un chaval de unos 14 años que lo miraba arrobado. Le sonrío. Me sonríe. Me tiende un cuaderno y un bic y me dice:
-- ¿Le puede pedir un autógrafo?
Yo me quedo impresionado, pero, consciente de mi función de difusor de la cultura y adiestrador de las jóvenes generaciones, le digo:
-- ¿Qué dices? pasa y pídeselo tú.
El mensaje es: aquí todos somos lectores. Somos iguales. Raymond Chandler publicó su primera novela a los 56 años.
El chaval pasa a la caseta, acojonado, y se dedica a seguir con veneración las evoluciones de JLSP a respetuosa distancia, hasta que el eximio autor se percata de que está pasando algo raro y le mira desde su altura (física: el tipo es viejo, pero muy alto)
El chaval le tiende el cuaderno y el bic y a duras penas acierta a balbucear:
-- Autógrafo.
JLSP lo mira, atónito. Coge el cuaderno y el boli y le firma.
El chaval se va encantado de la vida.
JLSP me mira muy extrañado, mientras me tiende el libro sobre el que se apresta a regatear formalmente y me dice:
-- "Debe haberme confundido con un jugador de baloncesto".
Bueno, ya he contado la batallita introductoria y ahora, la chicha:
Creo que firmándolo J.L. Sampedro merece la pena difundirlo
POR EL PLACER DE LA LECTURA: La SGA (Sociedad General de Autores) ataca de nuevo. Escrito y firmado por José Luis Sampedro, escritor, filósofo y buena gente. POR LA LECTURA
Cuando yo era un muchacho, en la España de 1931, vivía en Aranjuez un Maestro Nacional llamado D. Justo G. Escudero Lezamit. A punto de jubilarse, acudía a la escuela incluso los sábados por la mañana aunque no tenía clases porque allí, en un despachito que le habían cedido, atendía su biblioteca circulante. Era suya porque la había creado él solo, con libros donados por amigos, instituciones y padres de alumnos. Sus 'clientes' éramos jóvenes y adultos, hombres y mujeres a quienes sólo cobraba cincuenta céntimos al mes por prestar a cada cual un libro a la semana. Allí descubrí a Dickens y a Baroja, leí a Salgari y a Karl May.
Muchos años después hice una visita a un bibliotequita de un pueblo madrileño. No parecía haber sido muy frecuentada, pero se había hecho cargo recientemente una joven titulada quien había ideado crear un rincón exclusivo para los niños con un trozo de moqueta para sentarlos. Al principio las madres acogieron la idea con simpatía porque les servía de guardería. Tras recoger a sus hijos en el colegio los dejaban allí un rato mientras terminaban de hacer sus compras, pero cuando regresaban a por ellos, no era raro que los niños, intrigados por el final, pidieran quedarse un ratito más hasta terminar el cuento que estaban leyendo. Durante la espera, las madres curioseaban, cogían algún libro, lo hojeaban y a veces también ellas quedaban prendadas. Tiempo después me enteré de que la experiencia había dado sus frutos: algunas lectoras eran mujeres que nunca habían leído antes de que una simple moqueta en manos de una joven bibliotecaria les descubriera otros mundos. Y aún más años después descubrí otro prodigio en un gran hospital de Valencia. La biblioteca de atención al paciente, con la que mitigan las largas esperas y angustias tanto de familiares como de los propios enfermos, fue creada por iniciativa y voluntarismo de una empleada. Con un carrito del supermercado cargado de libros donados, paseándose por las distintas plantas, con largas peregrinaciones y luchas con la administración intentando convencer a burócratas y médicos no siempre abiertos a otras consideraciones, de que el conocimiento y el placer que proporciona la lectura puede contribuir a la curación, al cabo de los años ha logrado dotar al hospital y sus usuarios de una biblioteca con un servicio de préstamos y unas actividades que le han valido, además del prestigio y admiración de cuantos hemos pasado por ahí, un premio del gremio de libreros en reconocimiento a su labor en favor del libro.
Evoco ahora estos tres de entre los muchos ejemplos de tesón bibliotecario, al enterarme de que resurge la amenaza del préstamo de pago. Se pretende obligar a las bibliotecas a pagar 20 céntimos por cada libro prestado en concepto de canon para resarcir -eso dicen- a los autores del desgaste del préstamo.
Me quedo confuso y no entiendo nada. En la vida corriente el que paga una suma es porque: a) obtiene algo a cambio.
b) es objeto de una sanción.
Y yo me pregunto: ¿qué obtiene una biblioteca pública, una vez pagada la adquisición del libro para prestarlo? ¿O es que debe ser multada por cumplir con su misión, que es precisamente ésa, la de prestar libros y fomentar la lectura?
Por otro lado, ¿qué se les desgasta a los autores en la operación?.¿Acaso dejaron de cobrar por el libro?. ¿Se les leerá menos por ser lecturas prestadas?.¿Venderán menos o les servirá de publicidad el préstamo como cuando una fábrica regala muestras de sus productos? Pero, sobre todo: ¿Se quiere fomentar la lectura? ¿Europa prefiere autores más ricos pero menos leídos? No entiendo a esa Europa mercantil. Personalmente prefiero que me lean y soy yo quien se siente deudor con la labor bibliotecaria en la difusión de mi obra.
Sépanlo quienes, sin preguntarme, pretenden defender mis intereses de autor cargándose a las bibliotecas. He firmado en contra de esa medida en diferentes ocasiones y me uno nuevamente a la campaña.
¡NO AL PRÉSTAMO DE PAGO EN BIBLIOTECAS!
José Luis Sampedro
Si estas de acuerdo, pásalo. Por el placer de la lectura.
Esto empieza a parecer los locos de CanonBall.
ResponderEliminarjoder si al final habra que pagar a la Real Academia por hablar en Castellano.
No me hagas demasiado caso pero creo que la frawe es, o siempre se le ha atribuido a Millán Astray
ResponderEliminaryo tenía entendido que la frase era de Goebbels...
ResponderEliminarCon respecto a la carta de Sampedro, plenamente de acuerdo.
Saludos a la parroquia
ResponderEliminarLo del canon no da para más comentarios. Pero sí da para una pregunta ¿Quién se quedaría con la pasta recaudada por los préstamos de libros que no devengan derechos de autor? Y hay que tener en cuenta que estos expiran a los ochenta años de la muerte del mismo, lo que hace que sean un autentico mogollón las obras que no los devengan. Es decir que las instituciones públicas (ayuntamientos, comunidades autónomas y administración central, que suelen ser los titulares de las bibliotecas públicas) paguen con dinero también público a una sociedad privada por unos derechos que ya no existen. Cojonudo negocio este
Pero creo que la pregunta del millón la hace el impagable Sampedro ¿Se quiere fomentar realmente la lectura? Desde mi punto de vista, rotundamente no. Y como muestra un botón: los que frecuentamos esta barra, regida por el amigo Carpzovius somos todos gente que ha leído, lee y leerá (bueno, a este paso leeremos si podemos pagárnoslo). Y las consecuencias están a la vista. Por término general somos bastante escépticos, cuando no francamente descreídos, ante las cosas que nos cuentan los políticos, los curas y los voceros de las multinacionales. Y ya me diran vuesas mercedes de que coño viviría esta caterva si todo cristo leyese. ¿Y quién les votaría? Así que lo ponen en los programas electorales y lo vocean en los mítines, que queda de lo más bonito y políticamente correcto y luego…en fin, luego ya sabemos que pasa. De todas formas algo hemos mejorado, si lees, te canonizan en vida y, para abreviar trámites, sin la intervención del Vaticano. Por cierto el catecismo ¿paga el canon?
Y una duda ¿el canon será aplicable a los servicios de préstamo biblitecario de Institutos y Facultades?
Salud
Como novelista JLSP nunca me ha entusiasmado -a excepción de Octubre, Octubre- pero como persona de bien le tengo en grandísima consideración. Sabias palabras las suyas.
ResponderEliminarAparte de dejar constancia de que estoy de acuerdo al cien por cien con lo dicho por José Luis Sampedro, -como no podía ser menos-, una preguntita: ¿pagaría canon el lector del librito de la foto, el Comentario al Cantar de los Cantares de Salomón, al ser de la Biblioteca Pública Episcopal de Barcelona…? ¿Pagaría canon el autor de dicho comentario, Martino del Río, profesor ordinario de la “Academia de los libros divinos”, o bien sus herederos legales…? (Adiós, crítica literaria, lingüística y textual: cada vez que se citen “cachos” de un libro, a cantar la registradora).
ResponderEliminarMadre mía.
Fantástico tema.
ResponderEliminarConociéndolo no me extraña...
Te remito el enlace de una buena y conocida amiga, conocida por mí... no creas.
http://claraaldan.blogspot.com/2008/02/ya-he-contado-una-vez-que-jose-luis.html
Un abrazo
Durante toda mi vida, el que fue condecorado con el premio al mejor librero de la Comunidad Valenciana y mejor librero infantil del gremio de libreros me prestó y me ha regalado libros de diversa índole.
ResponderEliminar¿Debe pagar él con su pensión ese canon a una organización que gestiona derechos de rapaces ávidas de sexo con putas caras y wiskis demasiado dorados, demasiado impregnados de las turbas de pez y diamante de las tierras del norte para que sepan siquiera gustar su sabor con las papilas atrofiadas por días de tabaco y tertulia intrascendente, por unos libros que ellos serían incapaces de escribir?
¡No al préstamo de pagos en bibliotecas!
ResponderEliminarAquí, en la USal, estamos en pie de guerra contra dicho canon, si bien tampoco es que el actual rectorado se preocupe mucho por el servicio de bibliotecas (al menos, nada en absoluto por las humanidades).
De todos modos, viva y bravo por Sampedro, qué narices.
Amén.
ResponderEliminarEs lunes...no se me puede pedir más.
Besotes sin cánon
Yo ya estoy hasta los huevos de la Sociedad General de Chupones de Dinero. Acabarán poniendo cánones por leer un blog, por usar lapiceros, por los folios en blanco, por el adsl, por la luz... Esto ya es de locos. La puta hipocresía de hoy en día, que una sociedad de autores no sirva sino para restringir el acceso a la cultura... Que tenga que pagar con mi dinero a unos indeseables, que se hacen llamar artistas y que no han hecho más que sacar un disco o escribir un fétido libro en toda su puta vida... Si quieren ganar dinero como artistas que escriban, que canten, que pinten o que hagan lo que quieran, y si nadie les compra lo que hacen que se jodan, que no se aprovechen de lo que genrean otros artistas ni de la borreguez popular.
ResponderEliminarY basta ya de quejarnos sobre los cánones, que no tendrían que existir, lo que no tendría que existir es la SGAE, por eso y no por los cánones es por lo que tendríamos que protestar.
ABAJO LA SGAE
http://youtube.com/watch?v=FpDeTVc3wl0
Hola amiguito, me alegra que hayas hecho buen uso del envío, nos vemos pronto.
ResponderEliminarBesos
Perdón, pero sabéis si la sociedad de autores tiene previsto algún canon sobre el uso del sexo? miedo me dan con el Kamasutra para apoyar el tema...no pasarán
ResponderEliminarPor ahora aquí en los blogs podemos leer y escribir de gratis...
ResponderEliminarY sigue la decadencia de occidente y del planeta en general, añadiría yo.
Saludos!!!
Me sumo y lo paso, Mon Capitain. Y más aún viniedo como viene de un autor al que admiro y de una persona con sabiduría y sentido común.
ResponderEliminarSe le saluda, Mon Capitain
Yo soy lector asiduo de biblioteca y saco libros de vez en cuando, así que te imaginarás lo que pienso de esto.
ResponderEliminarSaludos.
Como el tema es muy general, contesto a todos a la vez:
ResponderEliminarprimo: la frase, ¿cómo podéis dudarlo? es del Reichsmarschall Hermann Göring. Millán Astray dijo incluso "Muera la inteligencia", lo que fue brutalmente respondido por Unamuno en el 36. (Busco la respuesta, que es lo último que Don Miguel escribió, y os la paso)
Goebbels estaba en otras cosas. Lo dijo Goering, palabra. Y por motivos parecidos a los que traen la cita a colación. Por eso la traigo, para que se vea que no tengo prejuicios.
Yo tampoco he sido capaz de terminarme una sola novela de JLSP, pero, en cambio, estudié Economía Política en el Lipsey traducido por él y algunos de sus ensayos de economía son más amenos que sus novelas. Lo digo con todo cariño.
No os metáis tan explícitamente con la SGAE, a quien yo no he mencionado en ningún momento, que luego el amigo Tddy Bautsta enreda en la red y pretende que me cierren el blog, con la consiguiente efusión de sangre que habría por medio, habida cuenta de que uno de sus principales barandas fue compañero mío de pupitre. Como suele decirse.
Lo malo no es ya el cobro del canon, sino cómo se reparte. Es decir: la cosa del así llamado "sondeo", que permite que los así llamados artistas pobres no cobren nada y los de siempre se lleven su parte. Pasa igual con la pasta de los bares y demás sitios públicos.
Además, no es sólo la SGAE, también están AISGE, AIE, CEDRO, VEGAP, y hasta DAMA (la entidad contestataria de los Bardem)
Saludos.
Pcbcarp: espero, por gandula, a que Ud. busque el texto de Unamuno, que ya le valía al pobre, ver entrar aquella caterva en Salamanca, después de pasarlas canutas en mi tierra (cómo se piró a París: mi abuelo no pudo, y además hubiera estado feo).
ResponderEliminarPublique a Unamuno, sí, a ese sí... (aunque también se ponía el hombre algo rancio con lo de españolizar Europa y "que inventen ellos", pero bueeeeh...).
Caigo rendida a sus pieses.
Ya me veo presentando justificante de ingresos para sacar un libro de la biblioteca sin tener que abonar.
ResponderEliminarDe acuerdo en todo con el señor Sampedro. Procedo a copiarlo, sin pagar canon, a imprimirlo sin pagar canon, y fotocopiarlo sin pagar canon, no sé si cobrarlo por la distribución. Y por supuesto, todo a costa de Papá Estado.
ResponderEliminarMuerte a la SGAE.
Saludos para todos.
Hola a todos:
ResponderEliminarPlas plas plas. Magnifico articulo. ¿Puedo pasar el texto de Sampedro a mi bitacora? El tema del canon y demas es algo que me enciende la sangre.
Por cierto, Unamuno respondio "Vencereis, pero no convencereis" a lo que el Manco respondio de la mejor forma que sabia, que era con la violencia. Parece que doña Carmen hizo algo correcto (por una vez) y se interpuso, salvando de la agresion al autor.
Un abrazo a todos.