6/7/10

Decencia

 

loreta

 

Acabo de leerme este libro, que recomiendo. Si bien San Leopoldo Abadía tiene esto de la crisis muy bien explicado, como era profesor de escuela de negocios, se queda en que el origen está en los bajos tipos de interés en Estados Unidos. Doña Loretta intenta enterarse de por qué estaban tan bajos.

Ambos dos coinciden en un punto: el origen de todo esto está en la indecencia.

Loretta Napoleoni, ya conocida nuestra por su libro anterior, “Economía canalla”, considera que los tipos estaban tan bajos porque había que financiar las frustradas operaciones de robo con homicidio a gran escala de los chicos de Bush sin subir los impuestos y la única forma era a base de endeudarse.

El libro puede resumirse así:

“La Administración Bush recibe de Bill Clinton un pequeño superávit y Barack Obama –que accede al poder en medio de la peor recesión desde la Gran Depresión- hereda una deuda pública de 10 billones de dólares, equivalente al 70% del PIB estadounidense, o mejor, al 18% de la economía mundial. ¿Dónde ha ido a parar todo ese dinero? Dos guerras aún activas y un sistema de seguridad tan ambicioso como inconsistente consumen las finanzas del Estado e incluyen a Estados Unidos en el grupo de países con la deuda pública más alta del mundo.

Todo esto no podría haber sucedido antes de la década de 1990, ya que los conflictos se pagaban con el erario público en vez de con la política de los bajos tipos de interés. ¿Cómo olvidar la histórica decisión de Lyndon Johnson, en la década de 1960 de aumentar la presión fiscal para hacer frente a los altos costes de la guerra de Vietnam? Fue una maniobra necesaria y, al mismo tiempo, profundamente impopular. En efecto, a nadie le gusta financiar de su bolsillo la maquinaria militar, aunque el objetivo sea destruir a un superterrorista como Osama Bin Laden o desembarazarse del dictador Saddam Hussein. A quienes se preguntan por qué estas guerras en Irak y en Afganistán, que parecen interminables y que no han suscitado un movimiento de oposición similar al que puso fin a la de Vietnam, se puede responder que mientras los gastos militares no afecten directamente a nuestro bolsillo o menoscaben nuestra libertad, obligándonos a ir al frente, los conflictos armados son virtuales, vividos exclusivamente a través del filtro de los medios de comunicación,”

(…)

“Con gran habilidad, los políticos y los medios de comunicación construyen en torno a esta psicosis la política del miedo que intenta presentar a Al Qaeda como el nuevo movimiento nazi y a Osama Bin Laden como la reencarnación de Adolf Hitler. Ha bastado esto para convencer a la población de que la supervivencia de la cultura occidental estaba de nuevo en peligro. Mientras quien la pulverizaba realmente, haciendo pedazos nuestro mundo y nuestro bienestar, no vivía en una región tribal de Pakistán ni iba vestido con harapos, sino que habitaba en Wall Street y en la City de Londres. Con sus trajes de diseño, viajando en jets privados, los destructores del moderno capitalismo eran halagados por los políticos y alabados por los medios de comunicación.”

(…)

“Las estadísticas y las falsas informaciones han saciado la sed inagotable de “noticias espantosas” de los medios de comunicación. Los políticos alteran los hechos, diseminan verdades hinchadas y, alguna vez incluso, mentiras. Los medios de comunicación las difunden. Nosotros nos angustiamos, tememos a cualquiera que tenga rasgos, ropas y costumbres diferentes de los nuestros, y ni siquiera se nos pasa por la cabeza echar un vistazo a lo que sucede en Wall Street, donde se dice que hacen dinero a paletadas. Es más, hacemos de todo para recoger las migajas de esta fiesta y no pensamos que es precisamente allí donde nuestra serenidad y nuestro sistema de valores están sufriendo el ataque más duro.”

(…)

“En la raíz de la crisis del crédito está la compraventa del riesgo bancario o financiero, como si se tratara de un bien, y la producción de riqueza ligada a este comercio. Las obligaciones estructuradas con paquetes de hipotecas subprime, así como las compuestas por los índices de los precios de las materias primas y los credit default swaps –apuestas sobre la insolvencia de los operadores financieros-, todas formaban parte de estos bienes ficticios ligados al riesgo, productos que durante años fueron intercambiados en los mercados. Los derivados cuantificaban su valor y precios. A diferencia de las obligaciones o de las acciones tradicionales –cuyo objetivo es recoger crédito para el crecimiento de los sectores público y privado-, estos falsos bienes acababan siendo usados por quien los producía y los vendía para aumentar swus beneficios y obtener un mayor estímulo del crédito. Y esta compraventa, que se producía electrónicamente, acababa creando riqueza, o mejor dicho, dando la ilusión de que la creaba.”

(…)

“En vez de reducir el riesgo a cero, de extirparlo como un cáncer de la economía globalizada, el Estado lo está desplazando de un sector a otro: del privado al público, y así empeora la situación. Está claro que esta política esconde la voluntad de mantener el statu quo ante, es decir, de salvar a toda costa una economía donde la creación y la comercialización del riesgo se han convertido en parte integrante del sistema. Naturalmente, esto ha sido posible gracias a la agresiva venta del crédito a precios regalados, es decir, a la política deflacionista perseguida desde la caída del Muro de Berlín, y a las finanzas estructuradas que lo ha transformado en un bien comerciable. Pero eso es una distorsión, una anomalía que debía ser corregida de inmediato. Es más, nunca habría debido verificarse.”

Loretta Napoleoni no tiene especial relación con perriflautas antisistema. Es economista y ha trabajado en el FMI, el Chase Manhattan y Laurie Milibank, ha sido consultora de la FAO y del BERD. Lo siento, de verdad.

8 comentarios:

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  2. En general estoy muy de acuerdo contigo y con Loretta. Supongo, como dices, que la información sobre el crimen tiene más valor cuando viene desde dentro de la cueva de ladrones. En cualquier caso, el salto de la economía capitalista clásica a la especulativa ha sido decisivo y, según parece, va a seguir siéndolo.
    A pesar de todo, no me acabo de creer que todo esto se haya montado sólo para invadir Irak. De ser así la primera medida "anticrisis" a adoptar debería ser abandonar el proyecto de invasión de Irán.
    Creo que a estas alturas a nadie se le escapa que los políticos trabajan para el FMI y no al contrario. El FMI no se sabe muy bien para quién o para qué trabaja, lo más probable es que para Satanás.
    En estos tiempos,en que nadie vota a los comunistas y en los que en países "civilizados" de Europa el comunismo está prohibido, Keynes parece marxista y esta señora del libro también.
    En fin, que sigas con tus lecturas de evasión veraniega, je, je.

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  3. Juan rafael, es que hay neocons muy generosos.

    Dizdira, no es que sólo se haya montado para invadir Irak. He cogido algunos párrafos que me parecían significativos.

    Recuerdo perfectamente ese momento, entre el 89 y el 90, cuando se liberalizaron las transacciones financieras internacionales. Un conocido, a la sazón director de un broker me dijo algo así como: "¿Tú has visto lo que han hecho?" los Estados acababan de renunciar al control de la economía.

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  4. Me parece bastante pobre la explicación de esta mujer, sobre todo viendo su impresionante curriculum. Los tipos de interés bajos fueron causa eficiente del problema, pero no la única. Tan importante o más han sido las facilidades de liquidez que la Reserva Federal ha ido dando en las sucesivas crisis financieras que han ocurrido desde finales de los 90. De hecho todo esto empezó en 1998 cuando, gobernando Bill Clinton ¡ojo!, un mega-fondo de inversión (Long Term Capital Management) cascó y aparentemente amenazó con llevarse por delante el sistema financiero USA. La Fed optó por soltar guita para arreglar el asunto, creando una inmensa bolsa de liquidez que fue engordando con los años, y con las crisis (burbuja de internet, 11S, etc...). No es un problema tanto de guerras como de riesgo moral, el de los amigos que se protegen dando por saco al resto. No olvidemos que la Fed es una entidad privada.Pensar que esto está causado por locos neocons es no entender nada: está causado por oligarquias que mutuamente se protegen y animan.

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  5. La FED no es una entidad privada. La FED es una entidad pública, donde los gobernadores son propuestos por órganos públicos, aceptados por políticos y sus sueldos salen del erario público; que fue creada por los poderes públicos después de los pánicos bancarios de 1907 a raíz de la publicación de la investigación de la Comisión Monetaria Nacional que, aparte de investigar el doble pánico de 1907 investigó por qué habían tenido 4 crisis bancarias en 30 años. La conclusión a la que llegaron era que, en los países con banco central esas cosas no les pasaban. El plan para la creación de un banco central privado fue rechazado por la cámara de representantes. El que fue aprobado fue otro muy diferente donde se creaba un órgano emisor público con capacidad de controlar a los bancos, aunque no era o mismo que hay ahora, la verdad.

    (http://odur.let.rug.nl/~usa/E/usbank/bank12.htmy http://odur.let.rug.nl/~usa/E/usbank/bank13.htm)

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  6. Coincido en que no se puede pretender explicar todo SOLO con el mantenimiento del tinglado bélico, aunque este sea una pieza importante del puzzle.

    Cuando esta señora promocionaba este libro la escuché en RNE y me interesó tanto que le dediqué un postio incluyendo el podcast de la entrevista.

    Me dio la impresión que en el fondo ella tampoco le da toda la importancia al tema militar, pero que esa línea vende más y por eso se centra ahí. También porque la temática de esa entrega concreta de su visión del mundo económico es hacer hincapié en el miedo, y el miedo y la guerra deben ir cogidos de sus huesudas manitas para resultar más sólidos, creo.

    Un saludo.

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  7. Quede claro que yo nunca pienso que nada tenga una sola causa, que eso es de arbitristas. La señora Napoleoni tampoco. Me imagino que el énfasis en la guerra como origen de los bajos tipos es más bien de la editorial para vender más libros.

    De todas formas, es evidente que algo de eso hay, aunque junto con otras cosas.

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  8. http://2.bp.blogspot.com/_BkqQvDhNgcc/TDmmLJmS9lI/AAAAAAAAAQg/0WZ_guKrrLw/s1600/Evoluc+fabricac+bienes+duraderos+militares+y+no+militares+USA+2000-2009.jpg

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