29/1/10

Sahara Occidental (II)




Esquema de familias y propiedades en el campamento Nº V. Caro Baroja. 1953.

En este deslavazado capitulillo, echaremos un vistazo al Sahara precolonial. Las fronteras actuales son enteramente convencionales, trazadas entre España y Francia a principios del s. XX. Aquí nos referiremos a la zona comprendida entre el río Draa al Norte, que era la frontera natural con el imperio marroquí, el Atlántico, y una frontera difusa -Jal-al-Jaof- al Sur de Cabo Blanco, en torno al paralelo 20º N y que, al Este, comprendería las rutas caravaneras más occidentales, incluyendo el importante “puerto” de Tinduf y las salinas de Iyil, zonas ambas que acabaron formando parte de las actuales Argelia y Mauritania en virtud de los tratados de Paris.

Existen vestigios de población humana en el Sahara Occidental desde tiempos remotos, como acreditan las pinturas rupestres y los utensilios prehistóricos encontrados en Ued Draa. Desde mucho antes de la invasión árabe, en el s. VII, existieron corrientes migratorias en dirección Norte-Sur, con penetración de pueblos mediterráneos que llegaron hasta el África subsahariana y que interactuaron con las poblaciones de raza negra al Sur del territorio. Con el tiempo fue produciéndose una mezcla de razas (mediterráneos, negros, árabes) hoy inextricable, pero fue a partir de entonces cuando se inició, primero con invasores de origen yemení y luego, sobre todo a partir del s. XI, con los almorávides,  la progresiva islamización y la introducción de los dialectos árabes hoy generalizados.

Dadas las características climáticas del Sahara, la mayoría de su población, muy dispersa, estaba compuesta por pastores nómadas, que recorrían el territorio en busca de pastos y agua, salvo las tribus sedentarias que practicaban una agricultura de práctica subsistencia en las zonas con humedad suficiente, principalmente en el Norte y cercanías del mar, como El Aaiún, Tan-Tan, Tisgui Renz. Como ya se ha dicho, por su carácter de zona de paso entre estructuras estatales desarrolladas al Norte y al Sur, el comercio ocupaba igualmente un papel importante. Las grandes distancias a recorrer por las caravanas impusieron un sistema de relevos y una organización extraordinariamente compleja que siguió funcionando hasta fechas recientes. Las caravanas confirieron importancia ya en el s. XV, a una serie de centros como Tinduf y Guleimina, cercanas al actual Sahara Occidental, aunque se fue desplazando paulatinamente hacia el Este.

Muchas de las fuentes históricas existentes sobre el Sahara precolonial, procedentes de los archivos de las tribus, fueron recopiladas en los 70 por la representación española ante el Tribunal Internacional de Justicia, para contrarrestar las tesis anexionistas de Marruecos y Mauritania. Así, conocemos en el s. XVIII a muchos hombres de ciencia y de letras cuya fama se extendió lejos del Sahara: Chej Mohamed Uld Mohamed Salla, autor de un tratado de Derecho, Emhammed El Tobla, gramático y poeta, Slmeyedie Uld Habil La, que llegó a ser profesor de la Universidad de El Cairo, el libro “Siete olas del mar”, el más antiguo de los textos Erguibat escrito en tiempos de la fundación de la tribu. Entre mediados del s. XVIII y principios del XIX, Mohamed el Mami escribió tratados geográficos y recopilaciones de folklore en los que destacaba la independencia del país en las fronteras del Jat-al-Jatof. El Ktab al Badiya habla de la vida y la cultura de los nómadas, a los que diferencia de los países vecinos, Chingueti (en la actual Mauritania), Tombuctú (Mali) y Tichit (sur de Marruecos).

De acuerdo con dichas fuentes, en el s. XVI, se data la fundación de la tribu Erguibat, una de las más importantes del Sahara, por Sid Ahmed Erguibí; quien,en 1504, Sid Ahmed Ergubí habría comprado a la tribu de los Beni Hafian, por 500 quintales de oro, un territorio cuyas fronteras trazan aproximadamente las del Saguia el Hamra y Río de Oro. Es la misma época fundacional de las otras tribus específicamente saharauis, como los Arosien, descendientes de Sid Ahmed Arosi, y los Uld Tridrarim, por Sid Ahmed Bo Gambor.

A partir del s. XVI, tras un tiempo de nuevas batallas con los almorávides, cuyas pretensiones hegemónicas derivadas del prestigio religioso no eran aceptadas por otras tribus locales, se estableció cierta jerarquía entre las tribus y una asignación territorial estricta de las zonas de nomadeo y control de los pozos que éstas respetaron hasta la colonización. Pueden establecerse dos grandes clases que podrían calificarse de dominantes y tributarias. Las primeras son las tribus “chorfa” (descendientes del profeta) y “arab” (descendientes de los antiguos conquistadores yemeníes). Son tribus guerreras que reciben tributo de las demás y que, en gran medida, daban cohesión al conjunto.

Las tribus “zuala” parecen ser descendientes de los almorávides, derrotados en su momento militarmente, pero prestigiosas en lo cultural-religioso. Luego las tribus znaga”, dedicadas principalmente al pastoreo, pesca artesanía y agricultura. Igualmente, los poetas. Finalmente los “haratoin” (libertos) y “abid” esclavos.

En el territorio saharaui existía una cierta organización política, económica y jurídica común, típica de las sociedades nómadas o seminómadas. El sistema de alianzas formaba una trama suficientemente densa para que el equilibrio de las fuerzas rivales impidiera una guerra que hiciera peligrar la existencia del conjunto. Como en el resto del Sahara, sus estructuras sociales evidencian una fuerte influencia de las sociedades beduinas de oriente medio; pero sus instituciones tienen un carácter diferente, con semejanzas con algunas tribus bereberes del Rif o del Atlas. En lo referente al papel de la mujer, ésta participa activamente en la vida económica de la comunidad y es depositaria de importantes responsabilidades, dada la necesidad de quedarse solas al frente de los campamentos durante largos períodos.

Dadas la dispersión que impone la vida en el desierto la tribu no se reúne más que en casos importantes. De la familia a la tribu se escalonan varias instituciones: la subfracción o grupo de jaimas cuyo número puede variar y que se desplazan juntas. Parte del ganado y de los recursos son comunes. Las decisiones son tomadas por la totalidad de los varones adultos.
La fracción se formaba por la reunión de varias subfracciones, campamentos, y este escalón era el más “operativo” al ocupar un espacio próximo. A su nivel existía ya una yemaa formada por todos los jefes de familia, que elegía a sus representantes. En las tribus guerreras, junto a estos órganos existía un consejo de guerra creado cuando se manifiesta un peligro exterior.

En caso de conflicto o amenaza para la paz (en especial disputas sobre el agua), el conjunto de las tribus se reunía en el Ait Arbain, institución intertribal a la que cada fracción y subfracción enviaba sus representantes, encargada de resolver los problemas que oponían entre sí a las tribus. Así fue la Ait Arbain convocada para acabar con la guerra que opuso durante 30 años a los Erguibat y los Tadjakent.

De este consenso intertribal, viene la localización territorial, al asignar a cada tribu la función y zona más idonea para la colectividad. Las tribus guerreras como los Erguibat o Uld Denim estaban localizadas en las zonas próximos a la frontera. Las tribus menos guerreras ocupaban las zonas costeras e interiores. Las tribus “znaga”, gentes de libros, como las Uld Tidrarin y Arossien, ocupaban posiciones entre unos y otros.

4 comentarios:

  1. Un completo trabajo de documentación sobre un asunto que yo, por lo menos, desconocía por completo -y mucho menos me imaginaba que los intereses etnográficos de Caro Baroja le hubiesen llevado al Sáhara. Da gusto leer cosas tan novedosas y bien informadas. Espero que no te aburras y continúes con la serie.
    Un abrazo.

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  2. Dizdira, no es nada completo, mujer, es un pequeño resumencillo introductorio. En cuanto a Don Julio, ya ves, en los 50 estaba en plena forma. Sus trabajos sobre el Sahara fueron lo primero serio que se escribió sobre el asunto, aunque él mismo reconoce que su trabajo de campo no duró más de tres meses y contó con el apoyo de las instituciones de la época.

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  3. verdaderamente es un articulo nefasto vacio de la realidad del pueblo saharaui,hazte la pregunta sobre el personaje de sidahmed erguibede donde vino?hijo de quien?el pueblo sahraui existio mucho antes.

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  4. Anonimo tienes que preguntarterte por que estas en contra de sidahmed ergueybi y rgueybat ?????????????? Adaragatu la tuhannnnnnnnnn

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